Negó todo y dijo ser inocente. Un pastor evangélico fue traído vía fluvial desde la localidad de Indiana, enmarrocado y acompañado de un grupo de hermanos de su congregación evangélica quienes creían en su inocencia.
El mal llamado pastor fue acusado de realizar tocamientos indebidos a una menor de 9 años de edad en este distrito. Bajo estrictas medidas de seguridad llegó a bordo de un deslizador que acoderó en el embarcadero de “Ganso Azul” para luego ser llevado de inmediato al Ministerio Público.
Según manifestó el padre de la menor, el pasado miércoles envió a su hija a comprar pan y al ver que demoraba demasiado fue en su búsqueda, en el camino, por unos matorrales, divisó al pastor Luis García Murayari en una actitud sospechosa, al acercarse, vio que junto a él, se encontraba la pequeña.
El mortificado padre, dio aviso a las autoridades, quienes trasladaron a García Murayari hasta la ciudad de Iquitos para continuar con las investigaciones del caso.
Durante su traslado, un grupo de personas y curiosos intentaron agredir al hombre tras enterarse que había intentado violentar sexualmente a la menor.
(C. Ampuero)